El trabajo infantil y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Construir economías fuertes, inclusivas y justas requiere de políticas y acciones encaminadas a garantizar que se protejan los derechos de todos los sectores de la sociedad. Esto necesariamente implica luchar contra el trabajo infantil y sus peores formas, pues los niños, niñas y adolescentes (NNA) víctimas de este flagelo ven vulnerados sus derechos a educación (ODS 4) y a la buena salud (ODS 3), lo cual se traduce en mayores desigualdades y mantenimiento o aumento en los niveles de pobreza. Ante esta situación lograr cumplir con el fin de la pobreza (ODS 1) y reducir la desigualdad (ODS 10) será imposible antes del 2030.
Pensando en el bienestar y en el derecho de los NNA a desarrollar su potencial y participar activamente en sus comunidades, los líderes mundiales propusieron la meta 8.7 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): adoptar medidas inmediatas y eficaces para erradicar el trabajo forzoso, poner fin a las formas modernas de esclavitud y la trata de seres humanos y asegurar la prohibición y eliminación de las peores formas de trabajo infantil, incluidos el reclutamiento y la utilización de niños soldados, y, a más tardar en 2025, poner fin al trabajo infantil en todas sus formas. Esta es una invitación a todos los sectores para que se comprometan con los derechos de los NNA. Las empresas en particular son actores fundamentales, pues pueden estudiar sus cadenas de valor para garantizar que en sus operaciones no hay NNA víctimas de trabajos forzosos o peligrosos.
Cuando la sociedad civil, gobierno, academia y sector privado hacen esfuerzos conjuntos se pueden lograr grandes cosas. No te quedes sin hacer parte del cambio. Participa.