¿Hasta dónde la normalidad del continente africano,
como punto de encuentro de los cazadores,
afecta a todo el planeta?
Fuente imagen: https://elpais.com/
Mía y el león blanco es una película familiar dirigida por Gilles de Maistre. Es protagonizada por Daniah De Villiers, Mélanie Laurent y Langley Kirkwood. Fue estrenada en Francia el 26 de diciembre de 2018.
La protagonista de esta película, Mía, genera una fuerte conexión con un león blanco. Una rara especie de leones, originaria de la región de Timbavati en Sudáfrica. Actualmente no queda ningún ejemplar en libertad, ya que la mayoría ha sido víctima de caza.
En la película, luego; de tres años de compartir con el cachorro; Mía, nuestra protagonista; se entera que su padre, tiene el criadero de leones -en Sudáfrica- para venderlos al mejor postor; entre ellos cazadores con ballesta (una muerte dolorosa para cualquier ser).
Este descubrimiento; nos llena de miedo por la vida de todos los leones de este criadero; decepción por un padre que engaña a su familia, y no cumple con su palabra, que era: acabar el negocio familiar de leones para caza y protegerlos.
Vale la pena destacar que la producción se llevó a cabo a lo largo de tres años en Sudáfrica para que el elenco pudiera unirse y crecer con los animales que aparecen en la película. Destacamos que las escenas entre De Villiers y el león en la película son reales.
Aquí inicia una emocionante aventura; Mía decide huir y llevar al león blanco hasta la reserva Timvabati. Este largo trayecto se convierte en el punto de encuentro entre el llamado “depredador” y una adolescente. Esta historia, nos enseña que podemos ser más depredadores los humanos y debemos cambiar el chip de la manera en que consumimos en el planeta; dejar atrás, esos elementos que llamamos normales, como la caza y fortalecer otras economías.
El Objetivo de Desarrollo Sostenible ODS 15; Vida y ecosistemas terrestres busca proteger, restablecer y promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, efectuar un orden sostenible de los bosques, luchar contra la desertificación, detener y revertir la degradación de las tierras y poner freno a la pérdida de diversidad biológica.
¿Cómo entra el león en este ODS?
En África, el león representa la fuerza, la nobleza, la autoridad. Representa la fauna salvaje del continente, es usado como emblema - caso de la selección senegalesa de fútbol- incluso el presidente de Níguer, Mahamadou Issoufou, se le ha dado el nombre de Zaki (león, en idioma hausa). En muchos países, además, supone una importante fuente de ingresos procedentes del turismo – aunque todavía no logra superar los ingresos por la caza.
Hace 100 años, solo un siglo, este continente albergaba unos 200.000 ejemplares repartidos por un amplio territorio, en la actualidad se estima que quedan unos 20.000 reducidos a solo siete países, Botsuana, Tanzania, Kenia, Sudáfrica, Etiopía, Mozambique y Zimbabue.
¿Qué pasaría si se extingue el león?
En la sabana africana viven muchos depredadores como leones, leopardos y guepardos. Pero sólo los leones pueden cazar los animales más grandes, como búfalos, ñús y cebras; en ocasiones incluso hipopótamos, elefantes y jirafas. Así que si desaparecieran aumentaría la cantidad de estos herbívoros. También aumentaría la población de animales que compiten con los leones (como los leopardos o las hienas) por conseguir presas más pequeñas como gacelas y jabalíes. También sucedería que una mayor cantidad de herbívoros consumirían más plantas, lo que podría hacer que desaparecieran algunas de ellas. En consecuencia, se reduciría la cantidad de algunos pequeños animales como insectos y gusanos, lo que repercutiría en las poblaciones de algunas aves en el mundo. Todas las especies de un ecosistema están relacionadas.
En África es habitual cazar leones. Existen reservas de caza y cuotas anuales para esta especie. Muchas compañías de safaris de caza no respetan estas cuotas, dejan a los clientes matar tantos animales como puedan.
Hubo una frase en esta película que me impactó - “Esto es Sudáfrica” – y bajo esta normalidad debemos adaptarnos. Me reúso a no cambiar las reglas; me reúso a no proponer nuevas formas de relacionarnos con la biodiversidad; nuevas economías, en donde todas las especies tengamos un lugar: VIVOS.
Los invito a ver la película y compartirme sus puntos de vista a través de mis redes sociales Instragram, Twitter, youtube como @sentirplaneta
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