Mascotismo: qué es y cómo afecta a los animales silvestres
Por: Giulia Graziati
Probablemente a lo largo de tu vida hayas conocido a alguien, incluso hasta puede que sea un familiar, que ha tenido de mascota animales muy distintos del perro y el gato. Loros, canarios, tortugas, serpientes, monos y hasta tigres son tenidos como mascotas en domicilios particulares o son criados en cautiverio. ¿Realmente son mascotas? En el siguiente artículo de EcologíaVerde te contamos qué es el mascotismo y cómo afecta a los animales silvestres, así como cuáles son sus riesgos, entre otras características.
Qué es el mascotismo
El mascotismo es definido como la acción de retener animales silvestres en un domicilio particular o en cautiverio como si fueran animales de compañía o mascotas. Hay tres puntos de clasificación que son necesarias para entender qué es el mascotismo:
- Existen especies de animales que han padecido un proceso de domesticación por parte del ser humano desde hace miles de años y son los denominados “animales domésticos”. Actualmente, hay más de 40 especies de este tipo y algunos de ellos son utilizados como mascotas o animales de compañía: tienen el objetivo de brindar compañía y pueden sobrevivir únicamente con la ayuda de las personas. Los más comunes son el perro y el gato, aunque de estos mismos hay individuos que pueden sobrevivir en la naturaleza, ya no es lo más común.
- A su vez, existen otro tipo de mascotas llamadas “no convencionales”. Dichas especies son exóticas, son llevadas a otros países que no son el suyo de origen con varios objetivos, uno de ellos es la cría en cautiverio y su posterior venta. Ejemplos de este tipo lo constituyen aves como los canarios, conejos, cobayas, hámsteres, hurones, entre otros. Algunos sí son animales domésticos en su país de origen, como los conejos en España, pero no lo son en otros países y llevarlos fuera puede provocar ciertos problemas a varios niveles, incluido el ecológico.
- Por otro lado, existen animales que viven en su hábitat natural de forma independiente de los seres humanos, los denominados “animales silvestres”.
Muchas de las especies afectadas e involucradas en esta práctica son aquellas a las que se les atribuye alguna condición carismática o aquellas que se consideran “populares”. Por ejemplo:
- Aves: las aves son codiciadas por su belleza tanto por sus colores, como sus formas y su canto. Algunas son muy buscadas por ser consideradas “raras” en la naturaleza lo que aumenta su comercialización por su valor en el mercado.
- Reptiles: al igual que las aves también son muy comercializados. Los ejemplos más comunes lo constituyen las tortugas terrestres y acuáticas, los lagartos y las serpientes.
- Mamíferos: los más comúnmente capturados son los primates y ciertas especies de felinos que se encuentran gravemente amenazadas. En los últimos años, en muchos países se han puesto de moda especies como el mapache y la nutria para tener como animales de compañía. Aquí aclaramos estas dudas sobre ¿Se puede tener un mapache como mascota? y ¿Se puede tener una nutria como mascota?
Cómo afecta a los animales silvestres o exóticos
El mascotismo se encuentra íntimamente relacionado con el tráfico ilegal de fauna e implica que los animales silvestres sean capturados de su ambiente natural, sean retenidos y transportados en condiciones deplorables: de cada 100 individuos extraídos de su hábitat solo 10 son capaces de sobrevivir a la comercialización y 9 de ellos mueren en cautiverio.
Esta acción provoca fuertes daños, como traumatismos y patologías que son muy complicadas de sobrellevar. Muchas veces las personas capturan directamente animales silvestres de su región y los tienen como mascotas y debido al desconocimiento sobre el comportamiento de la especie, sus hábitos alimenticios o requerimientos de hábitats, estos animales pueden resultar agresivos y son un potencial peligro hacia las personas que los tienen en cautiverio. Al retenerlos, pueden sufrir deficiencias alimenticias, cambios en el comportamiento (agresividad, estereotipias, etc.), estrés, depresión, problemas de crecimiento y pueden enfermarse y morir con bastante facilidad.
Riesgos del mascotismo y sus consecuencias
El mascotismo constituye la tercera causa a nivel mundial de pérdida de biodiversidad y genera severas consecuencias, conozcamos algunas de ellas:
- Pone en riesgo la supervivencia de las especies y su estado de conservación.
- Disminuye el acervo genético que existe en las poblaciones naturales.
- Pone en peligro la salud pública, ya que pueden transmitir enfermedades y parásitos.
- Afecta a los ecosistemas ya que los animales silvestres cumplen un rol fundamental en ellos.
- Fomenta el tráfico ilegal de especies.
Qué ocurre si deseo liberar un animal que ha sido víctima del mascotismo
A raíz de esta problemática, te puedes preguntar qué pasa si quieres liberar un animal que ha sido víctima del mascotismo.
Un individuo que ha sido víctima del mascotismo debe ser rehabilitado y entrenado antes de ser liberado nuevamente a su ambiente original, proceso que resulta muy complejo y costoso. Este hecho puede darse en cualquier animal, pero principalmente en mamíferos, como el puma y diversas especies de monos, que no pudieron aprender de sus progenitores y de su entorno las conductas necesarias para poder sobrevivir en el ambiente como, por ejemplo, conseguir alimento, fuentes de agua, buscar refugio y protegerse frente a depredadores.
Otro hecho radica en que muchas de estas especies suelen ser portadoras de enfermedades nocivas que pueden dañar a otras especies de animales y al ser humano; por esta razón, previo al retorno de la naturaleza necesitan un tratamiento veterinario correspondiente. Además, debe considerarse el área de distribución de cada especie, ya que liberar un animal fuera de dicha área puede perjudicar al resto de las especies, pues puede convertirse en una especie invasora y desplazar a las demás, incluso provocar su extinción. Aquí puedes leer sobre las Especies invasoras: qué son, ejemplos y consecuencias.
La lucha contra la caza furtiva y el mascotismo
En ambientes muy biodiversos la caza furtiva es muy frecuente. Si no existen mecanismos de control ya sea a través de medios legales u otros medios es muy complicado luchar contra ella. La caza furtiva se encuentra asociada al tráfico ilegal de especies y al mascotismo, ya que dichas acciones se fortalecen y movilizan a causa de la oferta y la demanda que existe en el mercado.
¿Qué podemos hacer desde nuestro lugar como ciudadanos y ciudadanas?
- No saques a los animales silvestres de su ambiente natural.
- En casos de observar caza o trampeo, venta o acopio, lo mejor es hacer la denuncia ante las autoridades competentes.
- No fomentes el tráfico ilegal: no compres animales silvestres, comprar solo estimula el tráfico de especies.
- Es importante llevar a cabo programas de educación ambiental para concientizar a las sociedades y enfocar los esfuerzos en la conservación de las especies y los ambientes y el consecuente debilitamiento de las redes de tráfico y comercialización de fauna silvestre.
- Difunde información confiable acerca de qué es el mascotismo para poder generar concientización acerca de esta problemática.
Fuente: ECOLOGÍA VERDE