5 claves para mejorar las relaciones intergeneracionales en el trabajo

El incremento de la longevidad propicia la convivencia profesional de personas de diferentes edades

5fcc3e7ff2bbbDos ejecutivos de distintas generaciones conversando Shutterstock

El aumento de la esperanza de vida está provocando diversos cambios sociales. Uno de ellos es el aumento de la mezcla intergeneracional en diferentes ámbitos de la vida: en el entorno laboral, en las relaciones de amistad o en las actividades de ocio, entre muchas otras. El incremento de la longevidad provoca esta mezcla cada vez más habitual y que, en definitiva, aporta riqueza a nuestras vidas.

Sin embargo, no siempre es fácil adaptarse a esta nueva realidad, especialmente en el entorno profesional donde durante muchos años la estructura jerárquica y funcional primaba en muchos casos los años de antigüedad en la empresa, lo que solía desembocar en que a mayor edad, mejor posición en la compañía. Ahora esto ha cambiado un poco y hay una mezcla de edades y en el futuro esta tendencia se agudizará.

 

Para saber manejar estas situaciones, especialmente la de tener un jefe mucho más joven o la contraria, la de ser jefe de un equipo formado por personas más sénior, existen algunas pautas que podemos aplicar.

5fcc3def91895La longevidad favorece la convivencia de diferentes generaciones en el trabajo Shutterstock

Formación constante

Mantener una formación constante que permita si no igualar los conocimientos, sí al menos no ensanchar la brecha existente entre los más séniors y los más juniors. Es esencial hoy en día que la plantilla de empleados esté sometida a una formación continúa para poder adaptarse a las nuevas tendencias de mercado.

Equilibrio de fortalezas y debilidades

Complementar los puntos fuertes de unos con los puntos fuertes de los otros. De la suma del talento de un profesional experimentado con el talento de un joven lleno de energía y creatividad surge un resultado que es superior a la simple suma 1+1. Un ejemplo de esta colaboración la podemos ver con frecuencia en Estados Unidos en los equipos de investigadores médicos o científicos que buscan avances en la lucha contra alguna enfermedad. Es común incluir en el equipo a profesionales experimentados y con un gran bagaje, junto a jóvenes que están empezando sus carreras universitarias y que aportan pocos conocimientos, pero una gran creatividad.

5fcc3e98490d9Dos jóvenes ejecutivos participan en una videoconferencia con otro profesional de más edad Shutterstock

La jerarquía no es cuestión de edad

Desechar la ecuación a más edad, mejor posición jerárquica. Actualmente ya no se puede sostener una organización que prima únicamente la experiencia como baremo para ir escalando en la pirámide jerárquica. Hay que seleccionar a las personas en función de su valía singular y teniendo en cuenta sus fortalezas. Además, no necesariamente hay que recompensar a los profesionales con una posición más alta en el escalafón. Por ejemplo, un comercial senior puede ser extraordinario en su labor de vendedor, pero puede al mismo tiempo no tener habilidades organizativas. Por tanto, lo adecuado será mantenerlo en su posición, pero con mayores incentivos económicos.

Transferencia de conocimientos

Crear vínculos entre las personas y buscar la transferencia de conocimientos. Los empleados mayores son más experimentados y pueden enseñar muchas cosas a los más jóvenes. Los juniors, por su parte, pueden recíprocamente transmitir otros conocimientos que suelen costar más a los séniors, como por ejemplo todo lo relacionado con la tecnología.

Alentar el trabajo bien hecho

Premiar con palabras de aliento el trabajo bien hecho y especialmente cuando éste es producto de la colaboración intergeneracional. Esto permite que toda la organización vaya asumiendo como natural esta convivencia entre personas de edades muy diversas.

Fuente: La Vanguardia